Los anticristos entran a escena

Primera parte

Por Francisco Blanco Calderón

Gran incertidumbre a nivel mundial,  son los acontecimientos sobre la posibilidad de una tercera y última guerra mundial: Corea del Norte y Estados Unidos. Donald Trump y Kim Jong Un,  serán los responsables de la hecatombe nuclear si el capitalismo financiero y el socialismo de mercado les hacen  el juego.  El caso de Corea del Norte para preservarse  y expandir  su pretensión de consolidarse como dueño del mundo, de Estados Unidos. Amenaza bélica que esta minimizada en los grandes medios internacionales,  como si fueran solo jugarretas de dos locos e imbéciles desenfrenados.

CNN, Fox, El País, Televisa, TV Azteca, MVS  e Imagen junto a los periódicos El Universal, Excélsior, El Financiero están entretenidos en el golpismo de la derecha venezolana patrocinada por la CIA y las trasnacionales norteamericanas,  a fin de “apañarse” a toda costa, la reserva petrolera más grande del mundo, misma que fue rescatada y custodiada por el chavismo y la revolución bolivariana.

Simultáneamente la catarsis que se avecina en el 2018 con la posibilidad de un cambio de rumbo al modelo económico de México, en el que MORENA y Andrés Manuel López Obrador se mantienen arriba en sondeos y estudios de opinión para frenar el neoliberalismo que mantiene al país hundido desde 1982.

La manipulación de la información llega  a su nivel más crítico con la sospechosa detención en Guatemala, de Javier Duarte de Ochoa, ex gobernador de Veracruz. Detención acordada, según analistas nacionales y extranjeros, para estrenar la Ley General del Sistema Nacional  Anticorrupción, recién “abortada” por el Congreso,  curiosamente sin titular que la encabece. La información, deformada, inducida, dirigida a una masa multiforme: 66 millones de pobres. 62.4 millones de usuarios de internet. 55.7 millones  tienen computadora. 71.5%  usan telefonía celular. 46.8% se entretienen con TV analógica y el 23.7% con TV digital.  Y lo más grave: ni la mitad de los mexicanos leen al menos un libro al año. ( INEGI). Ante este panorama, en nuestro país se debate si se mantiene el modelo neoliberal dependiente y entreguista o se encamina a la transformación de un modelo nacionalista e interdependiente.

De ahí que el morbo mediático sea el principal ingrediente de la información en radio, prensa y televisión, en sermones de la iglesia cómplice, en charlas de café, en watts-app, en memes de Facebook, twiter, Instagram o Pinterest. La morbosidad mueve a la conciencia irracional, acrítica, sumisa e irreflexiva. La información “se traga, no se mastica”, venga de donde venga, diga quien lo diga. Lo vea, oiga o lea en donde sea. El objetivo es mediatizar, adormecer, movilizar, someter, manipular el propósito institucional, partidista, electorero del sistema político mexicano.

El caso de Javier Duarte llega a extremos inauditos: si se ríe frente a las cámaras, si le da zape un adolescente fisgón, si lo tiran de espalda en una camioneta, si su celda es de concreto y compartida con malosos de verdad. Todo entra al juego de una telenovela, no inédita, que se escribe día a día. La captura ¿ convenida?, en los pasillos de un hotel turístico en plena semana santa, el vuelo privado  su familia de Toluca a Guatemala, con el pellizco y coscorrón  del SAT, por transportar fuertes cantidades en euros y dólares, la despedida de sus hijos, la salida a Londres vía Colombia  de su esposa y  familiares. Por otro lado,  los cómplices atrapados en España o México, los amparos  a  legisladores pillos. Todo entra en la farándula para demostrar, a las conciencias adormecidas, que en México no hay corrupción y si se ataca furiosamente la impunidad.

Peña Nieto, el de la Casa Blanca, el de los nexos con Higa, OHL, Odebrecht. Un  Presidente que ni el lábaro patrio respeta: decide irse al suelo en el día de la Bandera en el zócalo capitalino o en la Plaza de la Soberanía veracruzana. El mandatario con menos del 20% de aceptación de la ciudadanía mexicana. El autor de las reformas estructurales, esas que hicieron del país el traspatio del imperio con la  venta de garaje de los bienes de la Nación.

Calderón socio de Hildebrando, origen de moche de Odebrecht, merecedor de  más de 120 mil muertos y cerca de 30 mil desaparecidos por su estúpida guerra contra el narcotráfico. El Presidente que dejó impune el asesinato de 49 niños en Sonora en la guardería ABC propiedad de la prima de su cónyuge. Fox, con su Martita y entenados, que hicieron grandes fortunas con Oceanografía y viviendas de interés social del INFONAVIT. De la Madrid, Salinas y Zedillo obedientes a los mandatos del Consenso de Washington, dictados por el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, dieron apertura al modelo neoliberal para privatizar todo: telefonía, ferrocarriles, banca, sistema pensionario, petróleo y electricidad, ejidos y playas e islas nacionales, aeropuertos, autopistas, puertos.

Todos ellos, cómplices de los gobiernos estatales de los cuales más de la mitad anda prófugo, encarcelado, denunciado o amparado pero todos miembros del amasiato del PRIAN, que este 2018 obligará “haiga sido como haiga sido” a los votantes vía Prospera, Oportunidades, acarreos, compra de votos, urnas “preñadas” pero sobre todo manipulación  de Gobiernos, partidos, clero, medios, sistema judicial, legisladores y empresarios.